Antisemitismo y desinformación pro-Kremlin

A pocos días de terminar el 2022, el ahora exiliado ex rabino principal de Moscú realizó unas llamativas declaraciones instando a la población judía a abandonar el país mientras pudiera, antes de convertirse en el chivo expiatorio del sufrimiento que la guerra de Rusia está sembrando en Ucrania.
A pesar los continuos esfuerzos del Kremlin por presentar a Rusia como la principal fuerza de resistencia contra el nazismo, los medios pro-Kremlin han esparcido mensajes antisemitas de forma rutinaria ahora y siempre. Buena parte de estos mensajes surgieron en círculos religiosos conservadores y nacionalistas rusos. Las autoridades rusas los «toleraban», si no los apoyaban, y de ahí que consiguieran dar el salto a los medios pro-Kremlin.
EUvsDisinfo ha recopilado numerosos mensajes antisemitas de desinformación pro-Kremlin, incluidos ejemplos de la televisión rusa controlada por el Estado participando activamente en teorías de la conspiración antisemitas, dando rienda suelta a declaraciones antisemitas de políticos y expertos rusos y sugiriendo transgredir el «tabú de la crítica al pueblo judío».
Antisemitismo disfrazado de teorías de la conspiración contra determinadas personas
Según un estudio de 2020 del Network Contagion Research Institute, las descripciones de tono conspiratorio que se hacen del pueblo judío a menudo están disfrazadas de teorías conspirativas contra algunas personas, como, por ejemplo, George Soros. Es una tendencia que hemos observado en los medios pro-Kremlin. La base de datos de EUvsDisinfo contiene más de 200 entradas documentando distintas afirmaciones de desinformación en las que se acusa a George Soros de todo tipo de maldades, desde controlar a los líderes ucranianos a estar detrás de las redes globales de trata de seres humanos.
Otro ejemplo reciente es un meme con un claro tono antisemita en el se que ridiculiza al presidente Zelenski, que fue compartido desde la cuenta oficial de Twitter de la Embajada Rusa en el Reino Unido. El American Jewish Committee condenó el meme y señaló que degradar la imagen de los judíos mediante estereotipos faciales ficticios es propio de la propaganda antisemita más tradicional.
No obstante, si en el pasado las autoridades rusas toleraron pero no iniciaron esos mensajes hostiles hacia la población judía como parte de su estrategia propagandística[i], tras la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia, la situación ha dado un giro evidente.
Según el rabino principal de Moscú, ahora exiliado, el antisemitismo del Gobierno ruso está aumentando y ha habido intentos de cerrar la Agencia Judía. Entretanto, la retórica de los canales de televisión rusos controlados por el Estado evidencia que las autoridades y los expertos pro-Kremlin están cada vez más cómodos con el antisemitismo.
La desnaturalización del Holocausto, una forma de antisemitismo
Uno de los ejemplos más atroces de esta retórica tuvo lugar en mayo de 2022, cuando el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, afirmó que Hitler tenía «sangre judía» y que «los antisemitas más fervorosos suelen ser los judíos», en lo que parecía un intento de denigrar al presidente Zelenski. Aunque supuestamente Putin se disculpó después por las declaraciones de Lavrov, este no fue un accidente aislado ni el último alegato antisemita del jefe de la diplomacia rusa.
En enero de 2023, en su conferencia de prensa anual, Lavrov aseveró que Occidente está librando una guerra contra Rusia con el objetivo de dar una «solución definitiva a la cuestión rusa», trazando así paralelismos entre los crímenes de la Alemania nazi y la ayuda internacional a Ucrania en su defensa de la agresión rusa.
Cuando el comentario recibió un contundente reproche internacional y de la Unión Europea, los medios de comunicación controlados por el Estado ruso, envalentonados por Lavrov, añadieron que los europeos, liderados por Adolf Hitler, exterminaron a seis millones de judíos.
Este tipo de declaraciones distorsionan y banalizan el Holocausto y constituyen una expresión de antisemitismo.
La cuestión es: ¿por qué los expertos pro-Kremlin están cada vez más cómodos con estas declaraciones?
La propaganda de guerra entraña un alto riesgo
La distorsión del Holocausto está vinculada a una desvirtuación general de la historia, según el profesor Yehuda Bauer, presidente honorario de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto.
El Kremlin lleva mucho tiempo recurriendo al revisionismo histórico para arrogarse legitimidad dentro de sus fronteras y proyectar una determinada imagen en el extranjero. En este contexto, el Kremlin ha sido categórico en la minimización de su alianza con la Alemania nazi y ha calificado de necesario el infame Pacto Molotov-Ribbentrop, que Europa está «demonizando» sin razón alguna.
Únicamente negando su complicidad con la maquinaria de guerra de la Alemania nazi ha podido el Kremlin propagar el mito de los «nazis de Ucrania», uno de sus pilares propagandísticos desde las protestas del Euromaidán de 2013 y 2014. El Kremlin pretendió desacreditar las protestas proeuropeas de Kiev, así como el giro prooccidental que tomó después la política exterior de Ucrania tildándolo de «golpe nazi». La base de datos de EUvsDisinfo contiene casi 500 ejemplos de desinformación pro-Kremlin sobre la «Ucrania nazi/fascista».
Los intentos del Kremlin de justificar la invasión de Ucrania equiparándola con el régimen nazi banalizan la memoria de los millones de víctimas del nazismo. Según dos historiadores de las universidades de Berlín y Múnich, esta narrativa también ha funcionado como una excusa rápida para llevar la violencia a niveles de la Segunda Guerra Mundial y ha disminuido la resistencia a cometer crímenes de guerra en Ucrania.
Al mismo tiempo, las exigencias de la propaganda de guerra difundida en Rusia han pulverizado los límites de lo que es aceptable decir en la televisión estatal. Sumada a la represión y expulsión casi totales de los medios y organizaciones de la sociedad civil independientes, esta propaganda ha creado un ambiente en el que los mensajes antisemitas y las teorías de la conspiración no solo se toleran, sino que se perdonan y prácticamente se esperan.
Sin intención de reconocer la complejidad de su propio pasado, el Kremlin sigue «gestionando» la historia y minimizando cuestiones como su antisemitismo del pasado (un ejemplo aquí) y, por tanto, del presente.
[i]La investigación del Network Contagion Research Institute ha demostrado que troles rusos han difundido memes conspiratorios antisemitas con el fin de amplificar y fomentar el antisemitismo de grupos extremistas a ambos lados del espectro político. En otras palabras, los mensajes antisemitas persiguen un objetivo claro.